LA CEGUERA Y LA DEFICIENCIA VISUAL

La ceguera o deficiencia visual se refiere a condiciones caracterizadas por una limitación total o muy alta de la función visual.

Las personas con ceguera son aquellas que no ven nada en absoluto o solamente tienen una ligera percepción de luz, es decir, que pueden ser capaces de distinguir entre luz y oscuridad, pero no la forma de los objetos.

Por otro lado, las personas con deficiencia visual son aquellas que con la mejor corrección posible podrían ver o distinguir, aunque con gran dificultad, algunos objetos a una distancia muy corta. En el mejor de los casos, algunas pueden leer la letra impresa cuando ésta es de suficiente tamaño y claridad, pero, generalmente, de forma más lenta, con un esfuerzo considerable y utilizando ayudas especiales. En otras circunstancias, es la incapacidad para identificar los objetos situados enfrente (pérdida de la visión central) o, por el contrario, para detectarlos cuando se encuentran a un lado, encima o debajo de los ojos (pérdida de visión periférica).

Por lo tanto, las personas con deficiencia visual, a diferencia de aquellas con ceguera, conservan todavía un resto de visión útil para su vida diaria (desplazamiento, tareas domésticas, lectura, etc.).